martes, 12 de abril de 2011

Veintinueve

Cuando tenia cuatro o cinco años aprendi a ir en bici. Solo me cai una vez... pero lo hice a lo grande: sobre ortigas. No llevaba mas k el bañador y cuando pude salir de la mata de ortigas, iba tan arañado k parecia un gato despues de una riña callejera. Ahora, de vez en cuando, me pierdo emocionalmente en alguna aventura sentimental. Cuando vuelvo de ella, mi madre, k es la k mejor me conoce, suele decirme: "Pobre gatito, ya te caiste otra vez en las ortigas..." No se la razon, pero acabo siempre lleno de arañazos.
;-)


14 comentarios:

  1. Yo esperé años para que me regalaran una dichosa bici. Cuando por fin se decidieron mis padres, además de ser una bici reciclada, ya no tenía ganas de montar de ella. Tal vez tardaron tanto por lo patosísima que era para todo.

    Un saludo.

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  2. Yo pasé directamente a una bici grande, debía de tener seis o siete años, pero aprendí muy rápido, me acueredo que me encantaba.
    Lo que si que tuve cuando tenía tres o cuatro años fue un coche con pedales y un volante. Me acuerdo como mis pies movian los pedales. Pero no me gustaba tanto como cuando cogí la bici.
    En cuanto a tus arañazos, eso es que te metes por sitios raros...

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  3. Divertida canción !!! y la historia genial !!!. Gracias por ponerla y atender las recomendaciones de tu club de fans, jajajajaj. Un abrazo grande.

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  4. Esa historia de la bici me suena... si... jejeje. Espero que no recibas más arañazos ;) Un besico

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  5. Ven que te curo, anda.....y no sufras, los arañazos se curan. Luego, si te dejan cicatriz, podrás fardar de en cuántas guerras has estado, no te preocupes tanto, en todo hay una parte buena.
    Sopla y ya verás como duele menos...luego un besito reparador de madre y curado! y a volver a montar, que lo importante es no cogerle miedo!
    Besos, Oli.

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  6. a los gatos es difícil arañarlos no? con tanto pelo...

    Yo aún recuerdo cuando aprendí a montar en bici y que cuando estaba arrancando con mi padre detrás sujetándome la bici, él me dijo "sigue" y me sonó algo lejos, me giré y vi que no estaba detrás iba sola, en ese momento me hostié por ir mirando atrás.

    Besos de martes.

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  7. Magnífico micro-relato, como siempre!

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  8. Tengo un punto justo en el centro de la frente. Salí a perseguir el coche de mi padre en el campo y volé, una piedrecita quedó incrustada. Casi no se nota pero si deslizo el dedo sobre la cicatriz me trae recuerdos.
    Un abrazo, y cuidado con las ortigas!!!

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  9. SAndra, es una pena k ya no tengas ganas de montar en bici... es muy divertido...
    ;-)
    Monica, tienes razon, me meto donde no me tengo k meter...
    ;-)
    Rombo, k conste k esta entrada la he hecho por ti...
    ;-)
    Music, pensaba k no te ibas a dar cuenta, jajajaja.
    ;-)
    Maripili, no le he cogido miedo por eso siempre llevo arañazos... Me guardo esos besos curativos para cuando los necesite...
    ;-)
    Pepinillo, si es k no estas a lo k estas (k diria mi abuela)...
    ;-)
    Krugius, oye, gracias...
    ;-)
    J.L. o sea, k eres un superheroe k vuela y no nos lo habias dicho... Si, tendre cuidado con las ortigas, k parece k me persiguen...
    ;-)

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  10. ¡Qué traicioneros que son los gatos!

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  11. ¿todavía 29?????!!!!!!! ODIO EL 29! quiero el 30 YAAAAA!!!!!!

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  12. Rific, si los gatos son mala gente...
    ;-)
    Rombo, estuve en la playita y saboreando los tambores de tu tierra...
    ;-)
    Maripili yo tb te eche de menos... Dejame pensar en el 30...
    ;-)

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